¡Quién le iba a decir a Lolo Rico que los instructivos sermones sabatinos que le metía a su patito, para que de mayor fuera un patito capitalista de provecho como dios manda (¡Viva el Mal, viva el Capital!), iban a acabar siendo implantados en las aulas de nuestro sistema educativo! ¡Ay, Lolo! Eso es lo que a veces pasa cuando se dan ideas, que algunos no le pillan la ironía a lo que se dice y lo toman a pies juntillas. El presidente del BBVA, Francisco González, emulando al genial Dick Van Dyke que hacía de banquero achacoso en la película Mary Poppins, se preocupa por la educación financiera de nuestros niños: “Es muy importante que los niños entiendan qué es el dinero y cómo funciona, para evitar los errores pasados”.
El resultado de esa sana inquietud es la impartición de clases de economía financiera, para que nuestros hijos entiendan qué es una hipoteca o cómo funciona la Bolsa. Nadie en su sano juicio se posicionaría en contra de ampliar el universo de conocimientos que ayudará a nuestros hijos a desenvolverse mejor en el mundo cuando sean adultos. Yo encantado, igual que ustedes, supongo. Pero la cuestión es quién redactará el temario de tal asignatura y qué enfoque se le dará. Estas cuestiones las aborda estupendamente Isaac Rosa en su blog y me parece muy oportuna la pregunta que se hace: ¿Habrá objetores a la educación financiera? La propuesta llega, además, en plena reivindicación del trato de 'usted' y de la 'autoridad' impuesta en las aulas como medida de arreglo de los males de nuestro sistema educativo nacional, como si las formas definieran el fondo de las cosas y no al revés.
Igual es que Lolo Rico veía venir todo esto y por eso le puso a su programa el nombre de La Bola de Cristal. Va a ser que sí.
Seguramente haya gente en contra de la educación financiera, después de todo somos 44 millones de españoles en el mundo... alguien tiene que estar en desacuerdo.
ResponderEliminarEn mi caso, no veo tampoco problema alguno. Y sé que tendrá buena acogida al llegar en el momento oportuno debido a lo del trato a la autoridad de un profesor... lo que tengo interés de en qué beneficiará esto al sr. Francisco González.
Lo que me resulta doloroso es que, en España, la Educación para la Ciudadanía provoque poco menos que un cisma de occidente, mientras que la Educación Financiera, mucho menos importante para la democracia -digan lo que digan los presidentes de los bancos-, probablemente acabe implantándose en este sacrosanto país sin la menor dificultad. ¿Recuerdas a Manolito, el de Mafalda? Para él, el dinero no era lo único importante en el mundo... también están los cheques.
ResponderEliminarTienes razón. Pero el problema de la Educación para la Ciudadanía es que en España no tiene tanto peso como debería (en Francia está mucho más desarrollada), los estudiantes no se lo toman muy en serio y los padres se ofenden si el profesor toca este tema o el otro... de hecho, han habido padres que no han querido que sus hijos/as tengan la asignatura debido a sus creencias (normalmente religiosas).
ResponderEliminarSeguramente la educación financiera, como pienso yo, entra más en vigor debido a los tiempos que corren... de crisis vamos. Y las palabras del que lo promueve han sido acertadas "Evitar errores del pasado" ... o presente. Quizás si la Ed. para la Ciudadanía hubiese empezado tras esta serie de abusos a menores y delitos por los jóvenes hubiese causada más impacto y ganado más apoyo.
Manolito no tendría muchos probemas ahora mismo en España.
Dejando a un lado la controversia de Educación para la Ciudadanía, me parece que esta nueva asignatura, según cómo se redactase su curriculum, podría ser muy útil. No hay más que recordar el impacto que tuvo en su día la "economía de mercado" en los antiguos ciudadanos de la RDA que se embarcaban en créditos sin tener muy claro el funcionamiento de los mismos... o, sin ir tan lejos, la profusión de hipotecas en España durante los últimos cinco o diez años y sus catastróficas consecuencias al subir "uno o dos puntillos" el índice de referencia. Lo que sería deseable es que se incorporasen conceptos de sostenibilidad, de ecología, consumo responsable, etc.
ResponderEliminar