No sé si vieron Uds. el pasado domingo el polémico Concierto por la Paz, celebrado a iniciativa del cantante colombiano Juanes en la Plaza de la Revolución de La Habana. Yo disfruté su espectacular final, con los Van-Van. Me contagié de la enorme fiesta que allí se vivía. Me felicité por ver a muchísima gente contenta y aparentemente feliz, cosa que daba por imposible en el comunismo. Tampoco vi caras o cuerpos famélicos, para mi sorpresa y estupor. Aquella gente que no paraba de bailar (¿cuántas horas llevarían bailando, dios mío?) parecía gozar de muy buena salud. Probablemente los hermanos Castro se cuidaron de facilitar el acceso a la plaza sólo a los cuadros mejor alimentados del partido. Si no, no se explica.
Bromas aparte: ¿Sabían Uds. que el pueblo cubano celebra elecciones cada 5 años, en el ámbito municipal, provincial y estatal, y que al mismo no concurren partidos políticos, ni tan siquiera el Partido Comunista, sino que existe libre concurrencia de candidatos a las elecciones, que son propuestos por las asambleas populares de cada ámbito, al estilo de la democracia asamblearia de la Revolución Francesa de los primeros años? A Cuba se la critica por no permitir el pluripartidismo político, pero hoy sabemos que el pluripartidismo político, bajo una sociedad capitalista que todo lo compra, no garantiza en sí mismo que exista democracia, o sea, gobierno del pueblo y para el pueblo, sino una partitocracia al servicio de los más ricos, con un fuerte bipartidismo que se alterna en el gobierno, según la tendencia ideológica (más liberal o más conservadora) de los más ricos.
Y si todo esto les parece poco, les recomiendo que le echen un vistazo al blog de Enrique Santiago, de donde he copiado las dos interesantes e ilustrativas preguntas y acotaciones anteriores. Hay veinte más. Seguro que alguna que otra les llama poderosamente la atención.
A los adalides de la democracia prestos a dar conferencias allí donde les llamen (y les paguen su caché, mire usté) les recomendaría dirigir sus escrutadoras miradas hacia Honduras. Ahí igual sí que tienen trabajo.
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Incorporaría un par de matices, sin ánimo de resultar "imperialista" ;-):
ResponderEliminar1. Habría que observar cómo se trata a la oposición interna; qué grado de libertad tienen para expresar sus opiniones; hasta qué punto se sentiría intimidado un candidato que no comulgara con las tesis oficiales
2. Las votaciones, victorias y aclamaciones populares por más de un 90% siempre resultan sospechosas (incluidas las de aquí, PP, PSOE...)
El último informe de AI, en el apartado dedicado a Cuba, empieza diciendo lo siguiente:
"Se siguió restringiendo la libertad de expresión, asociación y reunión. Agentes de seguridad hostigaron e intimidaron a periodistas y dididentes políticos. Cuatro presos de conciencia quedaron en libertad a principios de año, pero 58 siguieron encarcelados. La población cubana continuó padeciendo los efectos negativos del embargo estadounidense, sobre todo en relación con el derecho a la alimentación".
Pues ahí tienes a Yoani, mismamente, con su blog 'Generación Y', dando leña al régimen por activa y por pasiva. Que yo sepa, no está amenazada de cárcel ni nada por el estilo. Y al informe de AI también habría que buscarle los matices, sobre todo si lo comparamos con informes sobre los demás países del tercer mundo. A veces, parece que se nos olvida que Cuba lo es y hay cierta manía por compararla con Suecia. Y claro, así sale perdiendo. Y España también, por cierto.
ResponderEliminarTienes razón en lo de las comparaciones; tenía la idea de añadir las primeras líneas de los informes de AI dedicados a España y a algún otro país para poder comparar, pero el post hubiera sido un "ladrillo".
ResponderEliminarSin embargo, creo que Cuba tiene el derecho a ser comparada con los países más "avanzados" del mundo, ¿porqué no? No entiendo la manía de compararla con los países de su entorno, con Haití. Creo que Cuba es paradigma de muchas cosas: formación superior, medicina, arte, pensamiento político, ¿porqué no libertad de expresión?
En cuanto a lo de Yoani, quizás no la hayan amenazado formalmente con la cárcel, pero su vida no será muy cómoda en ciertos aspectos (los oficiales, sobre todo). Seguro. Y aunque lo fuera, ¿qué pasa con el resto de disidentes? ¿qué pasa con los 58 que menciona AI en su informe? El premio Ortega y Gasset probablemente la "blinda" de alguna manera y la convierte en la justificación del "buenismo" de Cuba. Además, lee cualquiera de sus anotaciones; ella denuncia precisamente esa falta de libertad de expresión que menciono...