martes, 21 de abril de 2009

Fluxusmeada bancaria


He recibido un correo de un conocido que me cuenta lo que hace unos días pudo presenciar desde su puesto de trabajo en un banco. Lo reproduzco tal cual, porque no tiene desperdicio:

"Queridos amigos, les escribo para hacerles partícipes de un hecho que ha tenido hoy lugar en el espacio principal de la oficina donde trabajo. Como saben, trabajo para un banco desde hace ya siete años. Y hoy, sin duda, ha sido el único día que he vivido allí una experiencia estética. Espero que no sea la última (alguno de ustedes sabe por qué digo esto). He presenciado una auténtica 'performance'. Sin aviso previo y con un público que no había sido invitado. Sin canapés ni vino. Sin fotógrafos para documentarla. Sólo unas cámaras de seguridad.  Quedará archivada sólo por un tiempo, excepto en mi memoria. Una acción al más puro estilo fluxus. Sin adornos. Y con un marcado carácter político. Les aseguro que también poético. Del tipo de arte que me gusta. Reducido a una ecuación del tipo arte+política=vida poética. El 'performer', un hombre de unos cuarenta y pico años es cliente del banco. Un tipo al que he atendido en otras ocasiones. Estaba sentado, esperando a que le atendiera una vez más. Le noté un poco nervioso. La oficina estaba llena de gente y le tocaba esperar. Hacía dos días había venido a pedir un adelanto de su nómina. Imaginé que volvía para intentarlo de nuevo. Parecía un poco desesperado. Quizá tenía prisa. Pasaron unos minutos. Se levantó. Se colocó en medio de la oficina delante de todo el mundo. Se bajó el pantalón, sacó su pene y comenzó a mear. Empleados y clientes nos quedamos perplejos. La actividad del trabajo se paralizó completamente. Cuando terminó se subió el pantalón y sin decir nada se marchó. Manolo, uno de mis compañeros, sorprendidísimo me preguntó: ¿Pero quién le ha dado a este tío permiso para mear aquí? -¿Te refieres al tipo de permiso que pedimos nosotros para cobrar a los clientes ciertas “comisiones” o para hacerles seguros de vida sin su consentimiento? Le contesté. Les animo a todos a que practiquen la 'fluxusmeada'."

Pues eso, a fluxusmear.

5 comentarios:

  1. buenísimo¡¡¡ a mi se me ocurren muchas mas perrerías...la cara dura y el mal trato al cliente en los bancos siempre queda camuflada por nuestro silencio.

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  2. ¡Maravilloso! ¡fantástico!. No digo más. Arte y politica es estado puro. Duchamp se hubiera sentido orgulloso

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  3. Vaya, vaya... No te gusta el disenso, ¿eh?

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  4. Ah, bueno... Si se trata de eso, ya está solucionado...
    Un saludo,
    Wilso

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