Ya he sostenido más de una vez en este mismo blog de ustedes que 40 años de Franquismo y educación nacionalcatólica no se superan así como así. Lo de la Reserva Espiritual de Occidente no era ninguna bobería. Nos acompañan desde entonces la sumisión a los poderosos, la aceptación de las jerarquías 'naturales', la conveniencia de no implicarse en la política, el insultante poder que aún tiene la Iglesia Católica, el desfile militar en el día de la raza... y el machismo incólume. Aunque han pasado ya más de 35 años desde la muerte del dictador cabroncete y muchísimos más de lucha por la igualdad de mujeres y hombres en todo el Mundo, en España sigue siendo mayoría la gente que piensa que la mujer mejor en casa y con la pata quebrada. Yo pensaba que 35 años sin censura, viendo la misma tele (y el cine y los libros y los cómics y el teatro) que los demás, harían que España se pusiera a la altura de Europa en una generación. En dos, a más tardar. Pero ya veo que no. Los Pirineos son muy altos, aunque existan los aviones y en nuestras pantallas y monitores LED aparezcan los ejemplos, aislados pero sólidos, de las Thatcher, las Merkel y las Ségolène... o los más igualitarios perfiles políticos de los países nórdicos, con alta presencia femenina en los órganos decisorios y de poder. Podríamos fijarnos en ese tipo de cosas, si decidiéramos salir de la Reserva. Pero no. De aquí a que en España gobierne una mujer falta la tira. Y a que la oposición o sus acólitos no hagan escarnio de su naturaleza femenina, al paso que van las cosas, ni te cuento.
A Javier Ortiz, algún tiempo después
Hace 1 año
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