En lo que Bush, Blair y Aznar van tirando de sus amistades y de sus magníficas relaciones internacionales para acabar con los siete dictadores de la lista que yo les citaba ayer, los curritos de a pie también podemos hacer cosas por mejorar el mundo, a ver si entre todos avanzamos -aunque sólo sea un poquito- para que haya más gente feliz.... o menos desgraciada, que no es lo mismo, pero es igual.
Por lo pronto, podríamos apoyar a la segunda Flotilla de la Libertad que va a llevar algo de consuelo y de solidaridad a un pueblo sojuzgado y encerrado entre muros en su propio territorio por una potencia ocupante y terrorista. En ese barco hemos de ir todos, los que queremos un mundo más justo -así, en plan 'miss'- y los que no estamos dispuestos a aguantar estoicamente que los fuertes se ensañen con los débiles.
¡Embárcate!
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