La versión original del Strawberry Fields de The Beatles es prácticamente insuperable, pero Peter Gabriel hace aquí un trabajo muy digno (no hace falta poner siempre el listón en lo más alto). A veces, la vida se compone de pedacitos simplemente bien hechos. Por pequeños y humildes que éstos sean, nos hablan siempre del cariño y del respeto hacia aquéllos que nos dieron tanto. Y entonces, sólo entonces, el mundo nos parece más amable, más humano, menos raro... ¡Feliz domingo a tod@s!
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A Javier Ortiz, algún tiempo después
Hace 1 año
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