Domingo de paso

Todo pasa y todo queda, pero lo nuestro es pasar. Los domingos son días perfectos para darnos cuenta de que sólo tenemos esta vida y que la vida también pasa y se nos va sin avisar. Disfruten de la compañía de los suyos, diviértanse como niños a ser posible durante toda la mañana y toda la tarde y, cuando esta noche se vayan a descansar y cierren los ojos, repitan para sus adentros "sólo tengo esta vida, sólo tengo esta vida" todas las veces que haga falta hasta que la frase adquiera para cada uno todo su significado y toda su dimensión. Verán que mañana lunes se levantan con otro cuerpo y tal vez -sólo tal vez- entenderán entonces por qué los curas insisten en lo contrario. Feliz domingo a todos.